Desde la llegada del Inter Miami a Monterrey, en las afueras del hotel Quinta Real en el municipio de San Pedro Garza García, se encuentran cientos de aficionados de todos los equipos, nacionalidades y ciudades del país que vienen a ver a su ídolo, Lionel Messi.
Muchos de ellos sin boleto para el partido de vuelta entre Rayados de Monterrey y el Inter Miami, pero con la ilusión de siquiera ver al campeón del mundo con Argentina en Qatar y tomarse una foto o conseguir un autógrafo.
La gran mayoría realizó distintos sacrificios por lograrlo. Desde estar parado más de 10 horas bajo el sol esperándolo, hasta viajar de una ciudad a otra o pagar grandes cantidades de dinero por una entrada al Gigante de Acero.
Isaac, de Tepotzotlán al sur de la Ciudad de México, llegó este mismo miércoles a Nuevo León y lo primero que hizo fue ir al hotel Quinta Real, aunque aún no tiene boleto para el partido.
«Llegué hace dos horas y mi intención es verlo, tener una foto o un autógrafo y lo máximo que pensaría en gastar por un boleto serían 10 mil pesos», confesó el joven con camiseta del Inter Miami.
Por otro lado, Giovani, que viajó desde Guadalajara, mandó a hacer una manta especial que tiene una foto del astro argentino con la camiseta del Barcelona y la leyenda: «Bienvenido a México, el mejor futbolista de la historia».
Él si consiguió boleto en la venta libre y pagó tres mil pesos por tener su lugar asegurado en la casa de los Rayados de Monterrey.