Ante el altar matrimonial consagraron su unión Liliana Apolinar Álvarez y Luis Fernando Cadengo López, intercambiando la promesa de amor y fidelidad como cimiento de su unión hasta el día de su muerte.
Testigos de su enlace fueron incontables familiares y amigos que les acompañaron en la emotiva y elegante ceremonia de sus desposorios, misma que tuvo lugar en la capilla dedicada a San Peregrino Laziosi.
Tomados de la mano se aceptaron como esposos y las felicitaciones no se hicieron esperar al término de la ceremonia, recibiendo incontables muestras de cariño y los deseos de que su unión se vea siempre regida por el amor y el respeto.