De no haber complicaciones en el estado de salud por las heridas y lesiones con las que resultó en el accidente de la avioneta, el piloto podría comenzar a ser “despertado” y desconectado gradualmente del respirador artificial con que se le tiene aún en el área de Terapia Intensiva del Hospital Hidalgo.
El doctor Eliseo Varela Martínez, jefe de Terapia Intensiva, aseguró que aunque de manera lenta, pero sigue la recuperación del paciente, sin que por ello se pueda asegurar que ya está fuera de peligro tras las delicadas lesiones craneales y las heridas expuestas que presentó en sus extremidades por el fuerte impacto derivado del desplome de la aeronave.
“Su estado de salud continúa grave, pero está estable y eso es muy favorable porque significa que está evolucionando bien al tratamiento”, mencionó el especialista al dar el reporte médico del quinto día después del accidente aéreo ocurrido en un predio rural ubicado al sur de la ciudad.
En ese sentido y luego de explicar que “el pronóstico médico del paciente, igual sigue siendo reservado a evolución”, el doctor Varela subrayó que se está a la espera de lo que defina el Servicio de Traumatología sobre el estatus de las lesiones para dar el siguiente paso.
“Nada más quedaría pendiente porque definiera el Servicio de Traumatología la fijación de las fracturas en definitiva, pues con eso en seguida se valorará hacer una ventana neurológica en los próximos días”, subrayó el jefe de Terapia Intensiva del Hospital Hidalgo.
Por lo pronto, se explicó que el paciente continúa con soporte ventilatorio (intubado), en coma inducido y bajo cuidados médicos especiales, en espera de que mejore su condición para entonces comenzar con la siguiente etapa que es cuando se le aplicaría la llamada ventana neurológica, tomando en cuenta que hasta el momento los neurocirujanos han concluido que no requiere ninguna cirugía cráneo cerebral, lo que resulta ser algo muy positivo y alentador para el estado del piloto.
Sobre el particular, el doctor Javier Esparza Pantoja, director del Hospital Hidalgo y quien ha estado personalmente al pendiente del caso, explicó que es un poco complejo predecir si el paciente se recuperará al 100% y si volvería a tener una vida normal, toda vez que todo depende en mucho si el grado de contusión en el cerebro dejó alguna secuela; “eso no se va a saber hasta que no sea totalmente despertado y desconectado del respirador para ver en el terreno cognitivo cómo se encuentra”.