Cuidado… no queremos parecer catastrofistas, pero nuestra Entidad está dando señales de desabasto de agua, y si bien no se compara con lo que sucede en Nuevo León, es un tema que debe de estarse monitoreando, porque si llegara a faltar el líquido sería una catástrofe, como en el Estado norteño, que es un asunto que no han podido resolver las autoridades porque no hay manera de hacerlo.
Las alertas están a la vista de todos, nos estamos acabando los recursos naturales no renovables; ahora es el agua en Estados del norte, pero ¿y los apagones que afectan sobre todo a Entidades del sur del país? Aunque la Comisión Federal de Electricidad dijo que fue por problemas técnicos la falta de luz que afectó a Yucatán, Quintana Roo y Campeche, pues sabemos que la mano del hombre también tiene que ver, ya que todo lo que está sucediendo en el país son llamadas de atención para los Gobiernos, pero también para la ciudadanía en general.
Incluso en Guanajuato se lanzó la alerta y si en tres semanas no empiezan las lluvias, se tendrán que tomar acciones de emergencia como ya se ha hecho en otras Entidades del país, como el bombardeo de nubes.
Evidentemente como sociedad algo estamos haciendo mal, pensamos que estos recursos nunca se acabarían pero nos está aplastando la inquietante realidad y lo comentábamos hace un par de semanas, que la siguiente guerra sería por el agua y si bien no ha llegado a guerra como tal, sí llegó a los golpes, pues varias amas de casa se pelearon a puño limpio por ser las primeras en lograr un poco del vital líquido de una pipa, pues tienen semanas en que esperan largas horas bajo el sol para conseguir lo que ahora se cotiza como oro.
De hecho, está en marcha un proyecto para provocar precipitaciones pluviales en Coahuila, Zacatecas y Durango, para medio mitigar los efectos de la sequía, problema gravísimo que también enfrenta Chihuahua; es de tal magnitud y tan serio el asunto de la escasez de agua, que hasta el mismo gobernador de Nuevo León le pide a la población dos cosas: reportar a los inconscientes que derrochan el agua en diferentes actividades, pero también implorar la ayuda divina.
Localmente, aunque la sangre no ha llegado al río, la escasez del agua ya afecta a algunas zonas de la ciudad, pues se denuncia que una amplia área del sur no tiene el líquido desde hace más de una semana, por lo que son miles las familias que están indignadas porque no tienen el recurso pero sí se los cobran, algo que afecta la cartera, ya que han tenido que comprar el agua a pipas de empresas privadas, lo que definitivamente las tiene en una situación comprometida.
Evidentemente, éste es un tema que más que preocuparnos debería ocuparnos, pues si todos pusiéramos de nuestra parte, y las autoridades hicieran lo suyo, tal vez no lleguemos a lo que está sucediendo en Nuevo León.
Pero dentro de las señales preocupantes hay buenas noticias, porque en redes circulan denuncias sobre fugas de agua, no en el afán de señalar culpables sino de arreglar la situación, pero lo más plausible es que la gente está proponiendo soluciones para no desperdiciar el líquido, por lo que si todos ponemos nuestro granito de arena, tal vez todo cambie.
Segunda llamada, segunda…