Ciudad de México – Andrés Manuel López Obrador, informó este miércoles que aumentó a 25 la cifra de muertos en un ataque a un bar nocturno en Coatzacoalcos, Veracruz, y anunció que la Fiscalía General atraerá el caso.
"Es muy lamentable y llena de tristeza el que hayan perdido la vida hasta ahora 25 personas, hombres y mujeres. Es muy triste todo esto", dijo el mandatario desde el Palacio Nacional.
El presidente calificó la jornada del martes por la noche en el puerto de Coatzacoalcos de "muy difícil" tras el ataque por parte de delincuentes en un centro recreativo.
De acuerdo con su información, los posibles responsables del suceso habían sido detenidos hace unas semanas pero fueron puestos en libertad. "Ahí hay un problema que tiene que investigarse sobre la actuación de la Fiscalía de Veracruz", apuntó.
Por ello, indicó que ya se ha pedido a la Fiscalía General de la República que atraiga el asunto para llevar una investigación "a fondo" que incluya, si es necesario, a posibles autoridades implicadas.
El "contubernio" entre crimen organizado y autoridades "es corrupción, y es lo que tenemos que ir también combatiendo", agregó.
"Se reportan al momento 25 personas fallecidas, 16 hombres y 9 mujeres, 13 personas heridas, las mismas que reciben atención médica", confirmó la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz poco después en un mensaje en Twitter.
Mientras, el gobernador de Veracruz, Cuitlháuac García, indicó en un breve mensaje en redes que uno "de los autores materiales es Ricardo "N" alias La Loca", quien fue detenido en julio pasado y fue liberado en menos de 48 horas por la Fiscalía del Estado.
El bar nocturno "El caballo blanco" fue atacado el martes a las 22.00 hora local cuando se encontraba repleto de gente, primero con ráfagas de metralleta por individuos que dispararon de forma indiscriminada para después lanzar bombas molotov.
En un primer momento se habló de 23 muertos, cifra que ha aumentado a 25 en las últimas horas.
La mayoría de los actos violentos en el estado de Veracruz se producen como consecuencia de la guerra entre el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Los Zetas, dos de los principales grupos narcotraficantes que operan en el estado.