El candidato morenista de Encarnación de Díaz, Jalisco, Gilberto «Tito» Palomar, quien fuera víctima de un atentado, no contaba con ningún tipo de seguridad, sin embargo se desconoce si había recibido algún tipo de amenaza ni si el ataque fue orquestado por el crimen organizado, informó la dirigencia de MORENA de dicha entidad, encabezada por Jesús Osvaldo Vázquez Cuevas, quien expuso que actualmente el candidato morenista se encuentra en terapia intensiva en el Hospital MAC tras recibir cuatro impactos de arma de fuego.
Dijo que si bien en su momento el morenista despotricó contra Aguascalientes y cuestionó al Gobierno y a los cuerpos policíacos de aquí, se le decidió traer a la Entidad por la cercanía con Encarnación de Díaz. Los morenistas se dijeron agradecidos por la atención que se le ha dado al candidato por parte de las autoridades locales.
“Somos pueblos hermanos y la verdad que se demostró, la Policía Municipal de Encarnación de Díaz junto con la Policía del Estado de Aguascalientes, Guardia Nacional y el Ejército, desplegaron un operativo grandísimo para desplazar a todos los heridos al hospital lo más pronto posible”.
Vázquez Cuevas sostuvo además que tras este ataque se reforzará la seguridad en Encarnación de Díaz durante el proceso electoral del próximo 2 de junio, con la presencia de mayores elementos de la Guardia Nacional. Asimismo, manifestó que es seguro salir a votar, llamando a los habitantes de La Chona a no tener miedo y acudir este 2 de junio a las urnas a emitir su sufragio.
“Es tan seguro salir a votar a La Chona como es tan seguro salir a votar en Aguascalientes, existe la misma presencia policíaca y de Guardia Nacional y de corporaciones del Gobierno (…); está reforzada la presencia de las autoridades federales en Encarnación de Díaz, es decir que está la SEDENA, la Guardia Nacional, reforzando la presencia en Encarnación de Díaz”.
Cabe señalar que aún con la atención que aquí se le ha dado a «Tito» Palomar, la dirigencia de MORENA de Encarnación de Díaz no desaprovechó la oportunidad para, al igual que el candidato, despotricar contra los medios de comunicación locales, tachándolos de «amarillistas».