México, 8 sep (EFE).- Unas 200 personas, entre madres y familiares de víctimas de feminicidios, marcharon en silencio este domingo en Ciudad de México como una forma de recordar a las mujeres asesinadas, secuestradas, desaparecidas o violentadas sexualmente en este país.
Colectivos feministas se reunieron este día para una movilización que tuvo como punto de partida el Ángel de la Independencia, en la céntrica avenida Reforma, y como final el Zócalo capitalino.
Contrario a manifestaciones anteriores, la marcha estuvo encabezada por madres y familiares, seguidas por mujeres con niños y niñas y posteriormente mujeres solas además de organizaciones de derechos humanos.
En su tránsito al Zócalo, las manifestantes rompieron el silencio para exigir justicia a las autoridades.
«¡No estamos todas, nos faltan ellas!, ¡Ni una más, ni una más, ni una desaparecida más!, ¡Ni una más, ni una más, ni una asesinada más!», fueron sus consignas.
Además de «¡Ni una menos, ni una menos, todas vivas nos queremos!, ¡No más violencia contra las mujeres! y ¡Porque vivas estamos, vivas nos queremos!, ¡Porque vivas se las llevaron, vivas las queremos!».
También gritaron: «¡Nunca más la comodidad de nuestro silencio!» y exigieron que se emita un alerta de género para la capital mexicana.
«El feminicidio en México es ocultado por autoridades, es un delito muy grave que no debería ocurrir, pero al no haber sanciones ejemplares que hagan que no se repita cualquiera se atreve hacerlo y la sociedad ha dejado que el problema crezca», dijo Yessenia Zamudio, madre de una estudiante de educación superior que fue violentada y presuntamente asesinada por un profesor.
«Venimos a pedir a exigir justicia en silencio para ver la reacción de este Estado omiso e indolente; los feminicidos son algo espantoso, una pandemia una situación grave contra las mujeres», expuso Lorena Gutiérrez, madre de una chica de 12 años asesinada en el Estado de México.
«A la sociedad le pedimos que nos apoye porque a cualquiera le puede pasar esto (que una hija o familiar mujer sea violentada», añadió.
En un contexto de altos niveles de inseguridad y violencia en todo el país con una impunidad por arriba del 98 % en los delitos, las mujeres son uno de los sectores de la población más vulnerables de México, donde cada día son asesinadas 10 mujeres, según cifras oficiales.
A inicios de agosto una manifestación convocada en la céntrica Glorieta de Insurgentes de la capital tuvo lugar para llamar la atención sobre los recientes casos de violaciones por parte de policías capitalinos.
Pese que en un principio la marcha fue pacífica, terminó con destrozos en una estación de transporte público y en mobiliario urbano.
Días antes, el lunes 12 de agosto, hubo otra protesta por las mismas causas en la que también hubo destrozos, aunque más leves, en la sede de la Fiscalía capitalina, lo que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, tachó de «provocación».
Los días 10 de julio, 3 y 8 de agosto fueron reportados tres casos de violación de mujeres, una de ellas menor de edad, supuestamente por parte de agentes de policía de Ciudad de México.
Esta semana, fuente oficiales informaron que el Gobierno de la Ciudad de México implementará en estos últimos cuatro meses del años una serie de acciones inmediatas para prevenir las agresiones contra mujeres ante la oleada de violaciones y feminicidios en la capital
Entre ellas, un botón de pánico en el transporte público, el fortalecimiento de espacios seguros para mujeres o un banco de ADN son algunas de las medidas que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha propuesto ante un contexto de violencia extrema hacia las mujeres en todo el país.
Este plan de acción llega días después de que Sheinbaum iniciara una serie de reuniones con colectivos feministas que reclamaban participar en las políticas públicas de Ciudad de México.