México, 27 feb (EFE).- La directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Audrey Azoulay, entregó este jueves a México el Certificado de Registro Binacional (México/España) que reconoce la cerámica de Talavera como patrimonio mundial.
En una ceremonia oficial que se llevó a cabo en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el documento – titulado «Proceso de Fabricación de la Cerámica de Talavera como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad» – fue recibido por la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto, y por el ministro de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
La Unesco declaró el pasado diciembre Patrimonio Cultural de la Humanidad al proceso de la Talavera, la fabricación artesanal de cerámica de estilo talaverano que incluye a la producida en Puebla y Tlaxcala (México) y la de Talavera de la Reina y El Puente del Arzobispo en España.
Tanto en las ciudades mexicanas como en las localidades españolas citadas, los artesanos fabrican con métodos tradicionales objetos de cerámica de estilo talaverano para usos domésticos, decorativos y arquitectónicos.
Aunque las técnicas de la alfarería han evolucionado tanto en México como en España, en particular con la utilización de tornos eléctricos, los procedimientos de fabricación, decoración y esmaltado de este tipo de cerámica siguen siendo artesanales e idénticos a los practicados en el siglo XVI.
El subdirector general de Cultura de la Unesco, Ernesto Ottone, recordó este jueves que se llevó un intenso trabajo el pasado 11 de diciembre, en Bogotá (Colombia), durante la sesión número 14 del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, para lograr la inscripción de la cerámica de Talavera en la lista de la Unesco.
Ese esfuerzo, dijo, está en concordancia con el impulso dado en últimos años a candidaturas multinacionales. «No solo porque nos interesa que los pueblos se unan, sino porque esa diversidad entre continentes enriquece la diversidad de lo que la Unesco representa y el mandato que tiene», apuntó durante el evento.
El compromiso que implica la inscripción de la talavera en la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, fue retomado en su turno de palabra por la secretaria de Cultura del Gobierno México, Alejandra Frausto.
La funcionaria instó a implementar planes de salvaguardia que garanticen la sostenibilidad de todo el proceso, desde la fabricación y la dotación a los talleres de los recursos necesarios para su funcionamiento y hasta su comercialización.
El caso de la cerámica de Talavera de Puebla y Tlaxcala -estados del centro de México- es ejemplo de lo anterior, se trata de expresiones que son herencia directa de Talavera de la Reina y la cual llegó a través del Galeón de Manila en tiempos de la colonia española, explicó un boletín de la SRE.
«Desde la época prehispánica, México es un país moldeado en barro, así empezó un diálogo a través de la tierra, el agua y el fuego, que entró en plena concordancia con la tradición alfarera venida de España, de modo que el manejo de la talavera se dio forma muy natural y es lo que hoy se está reconociendo como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad», sostuvo la ministra mexicana.
Por su parte, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, señaló las raíces profundas que unen a España y México, e hizo un reconocimiento a los artesanos de talavera «quienes han defendido esta tradición y también han aportado nuevos elementos para que sobreviva en un mundo moderno.
En el acto protocolario se contó con la presencia de Martha Delgado, subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE; de Juan López-Dóriga, embajador del Reino de España en México; y de los artesanos Virgilio Pérez García y Jacqueline España.