CIUDAD DE MÉXICO, febrero 11 (EL UNIVERSAL).-
La presentación del cantante texano Usher en el medio tiempo del Super Bowl LVIII generó muchas expectativas por ser uno de los exponentes más exitosos de la industria estadounidense. El también productor de 45 años dio un espectáculo de luces y baile que dejó impresionados a más de uno, pero lo que más destacó fue el homenaje que decidió hacerle de manera sutil a Michael Jackson, una de las leyendas no sólo en la música, sino también en los shows del medio tiempo de este evento deportivo.
Fue en 1993 cuando el nombrado «Rey del pop» hizo historia con una presentación que no sólo hizo un recorrido musical por su carrera, sino que también mandó un mensaje de paz con la participación de cientos de niños de distintas nacionalidades que entonaron «We are the world», una composición que Michael hizo para recaudar fondos en la lucha contra la hambruna en África.
Ahora, Usher recordó con pequeños detalles el trabajo de Jackson cuando al inicio de su espectáculo, que comenzó alrededor de las 19:25, hizo algunos de los pasos más característicos de «El rey».
Luego de interpretar temas como «Catch up», «Bad girls» y «U Don’t Have to Call» no sólo se quitó la playera blanca brillante que portaba, sino que también se retiró uno de los dos guantes blancos con los que había aparecido desde el principio, quedando así sólo con un guante blanco en la mano izquierda, una referencia clara al intérprete de «Beat It», quien durante su vida y carrera se caracterizó por portar esta prenda en dicha forma.
Finalmente, cuando el cantante apareció con patines en un escenario circular, utilizó la base de sonido de una de las canciones de Michael: «Can you feel it» y mientras giraba y bailaba sonriendo a la cámara dio introducción a su más icónico tema: «Yeah», con el cual cerró su show, después de 13 minutos, acompañado del rapero Ludacris.
Algunos otros de sus invitados especiales fueron Alicia Keys, DJ Snake y Will.i.am, de Black Eyed Peas, a quien Usher le devolvió el favor de haberlo invitado cuando él y sus compañeros de agrupación fueron los estelares en el medio tiempo del 2011.
