Las personas con problemas crónicos corren el riesgo de que su salud se complique e incluso de que no resistan los ataques de los virus del Covid-19, por lo que deben ser los primeros en vacunarse con el biológico que se tenga a la mano, pues es mejor eso que no protegerse, afirmó el médico infectólogo Francisco Márquez Díaz.
Señaló que aunque se ha estigmatizado la vacuna Abdala de procedencia cubana, sin embargo se debe tomar en cuenta que es lo único que de momento se tiene en las instituciones públicas de Salud, por lo que debe aprovecharse sobre todo para proteger a quienes tienen problemas cardíacos, diabetes, insuficiencia renal, cáncer, asma u otras enfermedades que pueden agudizarse en caso de que se contraiga la enfermedad del coronavirus.
El especialista dijo que está comprobado que las enfermedades cardiovasculares preexistentes son factores de riesgo importante para un curso clínico grave del Covid-19, frente a lo cual no se debe exponer a quienes tienen esa condición sino que se les debe dar prioridad en la inmunización.
LA VACUNA PROTEGE Y SALVA
El doctor Márquez aseveró que si bien es cierto que entre la población hay ciertos grupos de personas que deben ser vacunadas contra las diferentes cepas o variedades del coronavirus, uno de los que deben ser protegidos sí o sí es el de las personas que cursan algún padecimiento crónico puesto que eso compromete más su estado de salud en caso de ser atacado por los virus del Covid-19, sobre todo tratándose de problemas del corazón.
Es muy cierto, añadió, que estas personas (enfermos del corazón, diabetes, antecedentes de derrame cerebral y otros factores de riesgo cardiovascular) corren más riesgos en su salud y vida en caso de enfermar de coronavirus, de manera que no se debe hacer confianza y acudir a solicitar la aplicación del biológico con que se cuente en las instituciones públicas del Sector Salud.
ESTÁ PROBADA LA PROTECCIÓN
Especialistas sostienen que al cabo de una serie de investigaciones sobre la efectividad o protección que brindan las vacunas autorizadas hasta ahora contra el Covid-19, los resultados muestran que la vacunación contra el coronavirus está asociada con menos ataques cardíacos y derrames cerebrales en personas con enfermedades cardíacas que se infectaron.
Asimismo, existe evidencia publicada que demuestra que las vacunas contra el Covid-19 no se asocian con un mayor riesgo de accidente cerebrovascular isquémico, ante lo cual es importante que los personas que padecen afecciones cardíacas se protejan con el reforzamiento de su organismo mediante la vacunación.