Estamos a unas cuantas semanas de que llegue a nuestro país la nueva variante de Covid, BA.2, manifestó el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Aguascalientes, doctor Guillermo Llamas Esperón, quien advirtió que, como siempre sucede, a México llega un mes después, como pasó con la primera cepa en el año 2020 y ha sido la constante en el tiempo que ha durado esta pandemia del Covid.
Ante esta circunstancia, lo lógico es que no se baje la guardia por ningún motivo, dado que China va al confinamiento de nuevo por el exagerado incremento de casos con la nueva variante y Estados Unidos tiene también un repunte.
Lo esencial es que todos nos cuidemos, como siempre lo hemos hecho, y no confiarnos porque tenemos bajo índice de contagios, porque el virus todavía está en circulación en todo el mundo y la cuarta ola es un hecho que nos llegará, todo es cuestión de tiempo, advirtió.
Recordó que al principio se redujo muchísimo la movilidad, sobre todo en los primeros tres meses, y la gente decidió quedarse en casa, encerrarse, “pero con el paso del tiempo la gente se cansó del encierro y, obviamente, como sucede en estos casos, las cosas tronaron y llegó el tsunami. Después del primer caso se nos dejó venir el problema y las instituciones de Salud se saturaron”.
Recordó que los recursos empezaron a escasear y por la parte del apoyo de las autoridades federales “mandaron batitas delgaditas y cubrebocas que no servían para nada, eran batas compradas a los chinos, después de que las mexicanas se las habíamos vendido a ellos y eso hizo que las cosas no fueran muy adecuadas”.
El galeno destacó que el manejo de la pandemia en nuestro Estado fue bueno, no como en otras partes en donde se vio una aguda falta de espacios hospitalarios.
“Sin embargo, dentro lo que cabe, se puede decir que en Aguascalientes al menos la atención a los pacientes ha sido lo suficientemente buena como para cubrir a los pacientes, yo no recuerdo haber visto una crisis severa, como la falta de camas hospitalarias, que la gente estuviera afuera de los hospitales esperando a que les dieran un lugar, como sucedía en la Ciudad de México”.
Hizo hincapié en que no obstante en que el país ahora está en semáforo verde por primera vez, esto no es un sinónimo de relajar las medidas de contención que ya hemos practicado durante dos años, a fin de que en caso de que llegara la nueva variante, no pegue tan fuerte en las instituciones de Salud ni a su personal, pero lo más importante: que no enferme nuestra población.
Matilde Arteaga
