Los problemas por la falta de energía eléctrica y apagones llegaron esta semana a su punto crítico, cuando habitantes de Norias de Paso Hondo tomaron la calle y retuvieron a empleados de la CFE para que por las buenas o por las malas les arreglaran el problema de la falta de energía, que se prolongó por varios días, causando serios daños y pérdidas.
De este modo, hubo este jueves manifestaciones y bloqueos de calles al oriente por los constantes apagones, además de que es un clamor social porque hay pérdidas millonarias en empresas y negocios.
Las tiendas de abarrotes señalaron que han tenido muchas pérdidas porque especialmente los lácteos y embutidos se echan a perder y que nadie les repone esas mermas y ellos van al día, por lo que se afecta seriamente su patrimonio.
Los usuarios del oriente de la ciudad, por su parte, externaron su profunda molestia debido a las fallas de energía, que debido a cinco días sin luz, les dejaron sin comida y con aparatos dañados o inservibles y adujeron que no es justo que pierdan por la ineficiencia en las políticas públicas del Gobierno Federal y la insensibilidad de la CFE, a la que “le vale” todo lo que el ciudadano sufra a causa de los errores en el manejo de la energía y la falta de previsión para evitar que se den estos daños y que los ciudadanos paguen los platos rotos, como siempre.
Señalaron que los apagones han causado serios daños en sus aparatos, pero también han afectado sus economías y su vida cotidiana.
Además de los vecinos del oriente de la capital, también se han visto afectados por estas fallas habitantes de las colonias Altavista, San Felipe y Miravalle, quienes se han quejado que hace unos días se fue la luz por cinco horas y tuvieron que tirar toda su comida porque se echó a perder.
Las afectaciones son de gravedad, pues se han parado empresas, negocios e industrias ante los apagones que han afectado desde hace varias semanas a la Entidad, tanto en el alumbrado público, que ha mantenido en tinieblas a sectores enteros de la ciudad, exponiéndolos a ser presa de la delincuencia, además de instalaciones hospitalarias, suministro de oxígeno a enfermos, ventiladores y climas para contrarrestar el fuerte calor y otros aparatos que se han descompuesto por los repentinos apagones.
Ante estos daños originados por la falta de previsión del Gobierno Federal, el clamor ciudadano es en el sentido de quién pagará los daños millonarios que se han generado en sectores empresariales y colonias de la ciudad, además de las consecuencias en la salud de los enfermos que han tenido que quedar desconectados de aparatos de oxígeno por las fallas de energía.