La peligrosidad de la cuarta ola de la pandemia obligó a las autoridades sanitarias a retomar los controles estrictos en los servicios funerarios, a fin de evitar el riesgo de que en las velaciones se propaguen los contagios por el incumplimiento de los protocolos establecidos.
Por delante se ordenó continuar con la cremación o inhumación directa de los cadáveres de las personas fallecidas por Covid-19 o por sospecha, mientras que para las muertes por otras causas sólo se está permitida la velación por un tiempo máximo de 4 horas, con aforo controlado y sin presencia de niños y adolescentes menores de 15 años de edad.
Al dar a conocer las medidas de control para el manejo de cadáveres por virus Sars COV2, el director de Regulación Sanitaria, Octavio Jiménez Macías, señaló que se suprimió el permiso para la velación en domicilio, por lo que todo tiene que ser dentro de las mismas funerarias o bien con sepultura directa, además de que también se estableció la prohibición de los traslados de cuerpo con diagnóstico de sospecha de coronavirus o de diagnóstico de Covid-19.
Precisó que luego de que ya se habían liberado la mayoría de las medidas, excepto las de la disposición inmediata de los cadáveres relacionados de manera directa con la pandemia, como es el caso de la sospecha o confirmación del coronavirus, las circunstancias de la pandemia hacen necesario que se restablezcan y que se vigilen de manera celosa los controles para evitar los riesgos.
Las disposiciones marcadas para la actividad de las agencias fúnebres indican que en lo sucesivo y hasta nuevo aviso, sólo se podrán realizar velaciones por cuatro horas, en estos casos específicos para muerte no relacionada con Covid, en las salas de velación en funerarias, por lo que se debe continuar con las medidas sanitarias de protección (portar cubrebocas, usar alcohol en gel, presencia de tapete sanitario en las entradas).
Se debe atender la restricción de aforo a 20 personas como máximo por sala de velación, quedando prohibido el acceso a menores de 15 años, además de que también queda bajo responsabilidad de las funerarias el vigilar que se respete la sana distancia fuera del establecimiento, así como evitar aglomeraciones.
De igual manera se prohíbe la velación en domicilio, independientemente de la causa del fallecimiento de la persona y, en el caso de las muertes por Covid o sospecha, el cadáver deberá ser incinerado o sepultado de forma inmediata.