En el templo de San Antonio de Padua se realizó una ceremonia especial en honor de Sofía García, quien llegó a sus quince años de vida.
Acompañada de sus papás, padrinos y demás allegados, la quinceañera se presentó en el sacro recinto y al pie del altar principal ocupó el reclinatorio especial que tenían destinado para ella.
Durante la homilía el sacerdote habló a la joven acerca de los cambios que va a tener su vida a partir de esta edad, y la instó a guiar sus pasos por el camino del bien, llevando a cabo los buenos principios que sus papás siempre le han enseñado.
Cuando finalizó la ceremonia Sofía se trasladó con sus invitados a la fiesta que organizaron sus papás, en su honor.