El tema del libramiento carretero ya se politizó, consideró el delegado de la CANACAR, Roberto Díaz Ruiz, quien destacó que se ha hecho una tempestad en un vaso de agua, “y de que esto se politizó, no me cabe la menor duda, pues hay quienes persiguen intereses nada claros y por ahí puede ir la cosa. Esto es ahogarnos en una gota de agua”.
En referencia al tema de que si no pasan por el libramiento se les aplicarán multas a los choferes, el delegado de CANACAR dijo que esto no debe preocuparles a los choferes porque las pagan sus patrones, pero también, es mejor por seguridad transitar por el libramiento que evadirlo.
Agregó que “una llanta de un camión cuesta más de 8 mil pesos y si se truena, qué es lo que se va a hacer, no se parará el camión si no se tiene refacción; en el caso de un camión rabón o torton se paga 139 pesos en la caseta, y de esos 139 pesos se acredita el IVA, ya son como 50 pesos y ya se habla de 80 o 90 pesos, contra impuestos federales que acreditan el 50 por ciento de lo que pagamos de casetas, así sería para un camión de esas características, pues te van a bajar 50 pesos, que es lo de dos litros de diésel; yo creo que esto más que nada se está politizando”.
Recordó lo que vale un tráiler unitario, entre el remolque y el tractor valen 4 millones y medio, “y si no se tiene 70 u 80 pesos para pagar la caseta, ¿Qué están haciendo en el negocio?”.
En referencia a la infracción, destacó que hay permisos para circular que expide el Municipio, pero los sujeta a horarios y rutas para que circulen por distintas calles, “únicamente está prohibido transitar a las horas pico que es cuando se causa más problema, que es de 7 u 8 de la mañana a las diez; a partir de la una vuelve a complicarse el tráfico hasta las cuatro de la tarde, y después se complica otra vez, como de siete a nueve de la noche. Yo sí entiendo el problema y nos hemos sujetado a lo que la autoridad hace, pues si nos salimos de lo que nos marca nos van a infraccionar y aquí hay que pagar”.
Lamentablemente esto se está politizando y “ahí sí ya no hay ni para dónde, porque si quieres que te dejen libre como estábamos, a cualquier hora, eso no va a ocurrir. Estábamos libres, nosotros que estábamos establecidos en el Segundo Anillo, nos indican por dónde entrar del norte, del poniente, del oriente y del sur, ya te dicen a qué horas y con qué unidades puedes circular, para llegar aquí tanto a nuestras oficinas como a nuestro taller de mantenimiento y nos sujetamos a estos lineamientos y no pasa nada”.
En referencia a que se tiene que cruzar la ciudad de sur y norte a poniente porque no hay libramiento para San Luis Potosí, respondió: “¿para qué se apuran los choferes, si los patrones somos los que pagamos? ¿Cuántos patrones has oído de una empresa más o menos mediana, o grande, que se hayan quejado de este tema? Ni uno solo. Pues a mí mis choferes de qué fregados se tienen que apurar si todos traen un tag para cruzar todas las autopistas del país, y a mí me llega un cobro cada diez días, el cual tengo 24 horas para pagar y si no se cancela el servicio, pero de aquí a México son tres mil pesos de ida e igual de venida… pues ¡pobres choferes!, ¿Cómo van a andar con seis mil pesos nada más para tarjetas, y nos estamos apurando aquí por 100 pesos?”.
Matilde Arteaga